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Mi nombre es Antonio Pérez

Artesano de joyería

Ferdinand nace en 2023, fruto de una promesa que me hice a mí mismo tras una conversación con mi padre. Unas palabras que sin saberlo se convertirían en las últimas pero que servirían de aliento para construir todo lo que ves.

Aunque pueda parecer una historia triste, Ferdinand es la materialización de un sueño que empezó desde pequeño. Siempre he tenido una especial sensibilidad por el arte y la belleza, atracción que iba de la mano de la pasión por la naturaleza y, aquí una de las claves, la geología: me volvían loco los minerales y las gemas -¡y los dinosaurios!-. Me encantaba dibujar, y llenar los dibujos de detalles y buscarles un sentido, tanto que la frase más repetida en mi familia era: “Ay que ver la imaginación que tiene este niño”.

Y así empezó Ferdinand, una habitación con un escritorio reconvertido en banco de trabajo, un par de limatones y muchas idas y venidas a Córdoba, amén de un sinfín de quebraderos de
cabeza. Sin prisa, pero sin pausa. Como un buen guiso que se cocina a fuego lento para extraer todos los sabores.
Desde Sevilla, con amor.

Y cómo no, ¡va por ti, Papá!